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Ejemplos reales: 5 Experiencias de escaladores en un rocódromo

Los escaladores nos cuentan sus experiencias más divertidas y surrealistas que les hayan ocurrido jamás en un centro de escalada

Situaciones graciosas, embarazosas, caídas… Hemos preguntado a los escaladores las experiencias más divertidas o surrealistas en un centro de escalada. Nos encantan las historias que nos han contado. Muchas gracias a todos los que habéis participado 😉


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Nombre: Frank 

Centro: 

Hace más de 15 años…me estaba iniciando en escalar, y llegué al roco y habían montado una competición, participé por “medio obligación”, quedando finalista en velocidad, perdí en la final contra el padre de un amigo mío que resultó ser un escalador que había abierto no se cuantas vías en la Comunidad de Madrid (Patones, Peñalara…). Ese fue mi primer contacto con la escalada deportiva

 

 


Nombre: Juan Terrones

Centro: Indoorwall El Clot

Enseñando a escalar a unos amigos novatos (sería la segunda o tercera vez que se ponían un arnés) asegurados en top rope, les até una cuerda adicional de 2 metros al arnés para que practiquen el chapaje de los seguros intermedios y así fueran cogiendo confianza para empezar a abrir vías. 

De repente, con mi amigo entre la 2ª y 3ª chapa, se acerca un chico corriendo con cara de terror y diciendo que se ha soltado la cuerda. Mi amigo acojonado se agarra a las presas que casi las parte, yo mirando y remirando el grigri, la reunión y el arnés de mi amigo intentando ver dónde estaba el problema mientras pienso en quién me manda a mí engañar a la gente a que pruebe la locura esta de la escalada. 

Al final todo quedó en un susto para todos, sin más consecuencias, ya que el chico había visto de pasada cómo la cuerda extra se salía de la 1ª cinta exprés, y no se había fijado en que mi amigo estaba asegurado en top. En cualquier caso le dimos las gracias, pues cuantos más ojos mejor, y ante la duda de si algo está o no bien hecho es mejor levantar la voz que callarse y confiar. Por suerte mi amigo terminó acabando la vía y hasta hoy sigue confiando en mí para asegurarle, no me preguntéis por qué.

 


Nombre: Anónimo

Centro: Indoorwall Vic

Estaba con una amiga en el autoasegurador y ella casi nunca había escalado, si lo había hecho alguna vez es porque yo le insistía y conseguía que algunas veces me acompañase. Ese día la convencí para que subiera en la pared del autoasegurado, ella no quería y no lo tenía nada claro pero después de que viera como yo lo hacía la convencí para que probase. Cuando ya había superado la vía, tocaba descender, pero al hacer el salto para bajar se bloqueó y se paralizó de tal manera que empecé yo a gritarle que ella podía que solo tenía que hacer un saltito para atrás para descender y de pronto estábamos medio rocódromo animándola para que saltase. Total, que el remedio fue peor que la solución y en vez de animarse a saltar se paralizó de tal manera que tuvo que subirse un chico asegurado con el autoseguro de al lado realizando un peligroso péndulo para tranquilizarla y ayudarla a descender bajando las piezas de la pared una a una hasta llegar al suelo. ¡Se murió de vergüenza y nos fuimos, aún ahora me lo recuerda y me dice que no va a subirse nunca más a una pared que haga más de 3 metros!

 


Nombre: Adrián López Vergara (@LopezClimb)

Centro: 

Estaba haciendo un bloque en un rocódromo de Berlin que se me estaba resistiendo. Entonces, llego un chico hablándome en ingles diciéndome si podía probar. Saco el bloque al primer pegue y yo que tenia el día malo, me pique empezando a murmurarle cosas faltosas como (que mamón el canijo este como ha sacado el bloque, etc). Bueno, ya que estábamos seguimos dándole a más bloques juntos, el seguía sacando todo a la primera y yo en varios pegues, siguiendo diciéndole cosas feas por lo bajini a la cara. Después de dos horas entrenando, me miro y me dijo: “¿Eres español, no?”. Resulta que era interprete, hablaba 3 idiomas perfectamente entre ellos español, fue bastante gracioso, tanto que nos hicimos muy buenos amigos. ¡¡Un saludo Zac, eres un maquina!!

 


Nombre: Alberto Palomares.

Centro: Torrejón de Ardoz

En uno de los momentos antes de iniciar el pegue a un bloque me puse a estirar la espalda con los brazos en alto y las manos juntas. Un amigo hizo una foto desde atrás, de modo que parecía estar “rezando” antes de iniciar el pegue. Causó sensación en las redes…😂😂. “ la conexión espiritual en la escalada “ 😂😂😎

 



 

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